Vidaitierra apuesta por un proyecto pedagógico coherente, con un sistema de actitudes colectivamente asumido y que respeta los intereses, deseos ,necesidades y dificultades de los niños y niñas, actuando en muchos momentos como una auténtica ?comunidad terapéutica?.
Nuestra necesidad de trabajar en la línea de garantizar un desarrollo psico-afectivo armónico es mayor y más evidente en las edades más tempranas.
Queremos evitar que el inicio de la escolarización en niños a estas edades suponga una experiencia dura, desagradable, aniquiladora del deseo, generadora de trastornos e introductor de factores de inestabilidad. Evitar que se trate de una experiencia límite que comprometa de modo importante, el equilibrio emocional de los niños y niñas.
Que los niños puedan tener una primera experiencia que sea generadora de deseo en lugar de tener que ser desagradable.
Evitar la angustia y ofrecer en su lugar un clima de confianza y seguridad
Convertir el proceso de primera escolarización en un proceso individual y grupal en el que se respete la especificidad de cada niño, evitando todo planteamiento gregario y masificado del proceso.
Que la entrada pueda ser una conquista hecha por el propio niño y por el grupo de niños.
Que el proceso de entrada sea tranquilo ,relajado, escalonado y progresivo ,por tanto no sea repentino, brusco y precipitado
Evitar en la medida de lo posible la ruptura que se puede dar entre el ambiente familiar y el escolar, y construir entre ambos algún tipo de lazo, de continuidad.
Impulsar la participación activa de los padres en este proceso.